viernes, 25 de septiembre de 2020

Los espárragos de Madame de Pompadour


"Querida condesa Baschi:

     Lo que le voy a contar no es precisamente poético. El marqués de R., que como usted sabe, no es precisamente muy delicado en sus gustos, paso ayer la noche con una comedianta y al final de la cena, estando los dos... encantadores, el marqués no encontró nada mejor que desvestir a su Venus y, preparando una salsa para espárragos la coloco en un lugar que no voy a nombrar pero que usted comprenderá y se dedico a comer los espárragos mojándolos en su salsa. Parece que le gustó, ¿qué piensa usted de ello? Espero su respuesta pero, por el momento, no puedo dejar de reirme de un placer tan original.
     
La marquesa de Pompadour."
   
La firmante de tan curiosa carta era Madame de Pompadour, un mujer que según dicen era preciosa, vivaracha, de boca pequeña, ojos azules  y sobre todo inteligentísima. Quien sabe que ardides guardaría para volver del revés a todo un Rey de Francia... a parte de los espárragos que seguro incluyó en su dieta. No es de extrañar que una de las frases que dejó para el recuerdo fuera aquella de: 

“Las mujeres llaman arrepentimiento al recuerdo de sus faltas; pero, sobre todo, al sentimiento de no poder cometerlas de nuevo” 

Y es que muchas han sido las favoritas que han pasado a la historia, la Du Barry, la Montespan, o la Maintenon, pero a buen seguro ninguna de ellas alcanzó el grado de poder, sofisticación e influencia que Jeanne-Antoinette Poisson, conocida por todos por Madame de Pompadour. Fue la favorita del Rey Luis XV e incluso llegó a hacer buenas migas con la reina a quien inteligentemente siempre respetó. Fue una gran protectora de las artes, amiga de Voltaire e impulsora de la Enciclopedia. En la sombra, fue prácticamente una reina durante la friolera de 20 años, tiempo durante el que llegó a preparar todos los informes que había de atender el Rey e incluso sus Ministros despachaban con ella en sus apartamentos, unos Ministros que por cierto dependían mucho para mantenerse en sus cargos de la opinión que de ellos tuviera la Pompadour, de hecho consiguió deshacerse de los ministros Orry, Monrepas, Argenson y Machault, y protegió a Bernis, Choiseul y Soubise. Por supuesto cuando su encanto físico declinó un poco, siguió resultando imprescindible por su inteligencia y por esa capacidad suya de saber cuando era el momento de dar un prudente paso hacia el lado que no hacia atrás, llegando incluso, sabedora mejor que nadie de los gustos y debilidades del Rey, a elegirle a sus nuevas amantes, chicas bonitas pero insulsas y sin capacidad para hacerle sombra, a pesar de eso, se dice que más que por una tuberculosis, podría haber muerto envenenada por la ambiciosa Du Barry

En fin, como ella misma dijo una vez al Rey, para animarlo tras una derrota:

"Por lo demás..., después de nosotros, que caiga el Diluvio...»

Imagen: El retrato de la Pompadour es obra de Jean-Marc Nattier - Museo del Hotel Sandelin.
Fotografía tomada de Wikimedia Commons - Dominio Público (CC0).- Se enlaza la Fuente Original

3 comentarios:

  1. las cortesanas tanto Francesas como Venecianas, fueron mujeres muy instruidas, no solo en las amatorias. En México Virreinal, la que paso a la historia como la mas bella e inteligente fue Maria Ignacia Rodriguez de Velazco, mejor conocida como la güera Rodriguez, la verdadera madre de independencia Mexicana, y que el Barón Von Humboldt la llamo la madame de Motespan Mexicana.

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    1. Gracias por tan interesante aporte. Intentaremos buscar una buena anécdota sobre su persona para traerla de visita al blog.

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